Rosas

Rosas, otro municipio estratégico en el proyecto, es conocido por su fuerte tradición agrícola y su capacidad para la producción de alimentos frescos, que son esenciales para la seguridad alimentaria local y regional. Sin embargo, muchos agricultores en esta zona se enfrentan a desafíos relacionados con la erosión del suelo, el uso ineficiente de recursos y la falta de capacitación en prácticas agrícolas sostenibles.

En respuesta a estas necesidades, el proyecto hortofrutícola ha implementado una serie de talleres y programas de formación para los agricultores de Rosas, enfocándose en la conservación del suelo, el uso eficiente del agua y la adopción de prácticas agroecológicas que permitan una producción más respetuosa con el medio ambiente. También se han entregado herramientas y equipos para facilitar el manejo de los cultivos, promoviendo la modernización de las fincas locales.

Los resultados en Rosas han sido prometedores: los agricultores que participan en el proyecto han reportado un aumento en la productividad de sus cultivos de frutas y hortalizas, junto con una mayor diversificación de sus productos, lo que ha mejorado su capacidad para acceder a mercados más competitivos. El proyecto también ha fomentado la creación de cooperativas y asociaciones locales, permitiendo que los agricultores trabajen de manera más colaborativa para mejorar sus ingresos y fortalecer la economía comunitaria.